Cuando andábamos a la deriva, todos los caminos nos valían pero cuando inconscientemente nos adentramos en una dirección, empezamos a pensar que el camino nos había elegido a nosotros. Yo también me pregunto ¿y ahora qué?
Javi, da gusto ver la cantidad de caminos (caleyas, como las llaman mis parientes asturianos)que se siguen abriendo desde tu todocambia. Es un lujazo. Hoy me quedo con las respuestas sin pregunta y con los ojazos de la vaca de Ventaniella, tan llenos de misterio y calidez. Un abrazo, salao, y que sepas que, aunque no diga nada, te sigo.
Cuando andábamos a la deriva, todos los caminos nos valían pero cuando inconscientemente nos adentramos en una dirección, empezamos a pensar que el camino nos había elegido a nosotros. Yo también me pregunto ¿y ahora qué?
ResponderEliminarLo peor no es tanto estar a la deriva, sino navegar en círculos.
ResponderEliminarJavi, da gusto ver la cantidad de caminos (caleyas, como las llaman mis parientes asturianos)que se siguen abriendo desde tu todocambia. Es un lujazo. Hoy me quedo con las respuestas sin pregunta y con los ojazos de la vaca de Ventaniella, tan llenos de misterio y calidez.
ResponderEliminarUn abrazo, salao, y que sepas que, aunque no diga nada, te sigo.
Nacho
Ay, ay, ay....Javi,que pasa si solo tenemos preguntas sin ninguna respuesta? Creo que caigo en aquella categoria ; )
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